Con la llegada del frío, la naturaleza experimenta una gran transformación. ¿Cuáles son esos cambios? Algunos de ellos los hemos descubierto durante esta semana.
En el taller del martes nos formamos sobre la hibernación, la migración de aves, la caída de la hoja en el bosque caducifolio y descubrimos que algunos frutos crecen en esta época del año. Aprovechamos también para plantar en el huerto del colegio bulbos, grandes semillas con nutrientes que ayudan a la planta crecer en invierno.
El sábado fuimos en busca de todo lo aprendido a La Barranca. Una vez que sabes, es fácil observar cómo los animales cuentan con una capacidad sorprendente de adaptación a través de la modificación de su pelaje o plumaje.
Avistamos varias aves y comprobamos cómo en invierno cuentan con más pelaje para resguardarse mejor del frío. Nos sorprendió cuando nos explicaron que las aves que migran tienen un plumaje claro para absorber menos radiación solar y eso les permite hacer viajes más largos.
De mirar hacia arriba pasamos a mirar hacia abajo . Observando a las hormigas, los monitores nos explicaron que cuando caminan rápido, es un signo indicativo de que va a hacer frío. Además, cuando prevén lluvias, hacen montañas en el hormiguero para que no entre el agua y así no mojarse. ¡Muy hábiles son!
El gamo, el ciervo y el corzo pierden sus cuernas para que así no luchen entre ellos y conserven su energía. Los niños palparon sus cuernas y supieron diferenciarlas. ¡Qué grandiosas! Aprendieron también que éstas están cubiertas de borra que protege el hueso y donde circulan vasos sanguíneos, permitiendo el crecimiento del hueso.
“¿Qué animales se han comido esta comida?” ha sido uno de los talleres que también ha llamado mucho la atención. A través de restos de piñas y almendras, han descubierto si era la ardilla o el ratón de campo quién había roído esos alimentos.
Para terminar la jornada, elaboraron un amasijo compuesto por grasa vegetal y semillas rico en calorías. La pegaron en distintos puntos de árboles que ayudarán a los pájaros a resistir el frío.
Sin duda el club de montaña es una pasada, si esto te apasiona, apúntate a la próxima, eres bienvenid@!
