Con la llegada del buen tiempo, ponemos en marcha el huerto del colegio. Esta actividad nos ayuda a comprender mejor lo que viene en los libros, desarrollamos nuestras habilidades motrices, trabajamos en equipo, nos inculca el valor del esfuerzo y nos permite aprender disfrutando del sol y al aire libre.
Frente a la inmediatez que nos rodea, veremos como evolucionan nuestros ajos siguiendo el asombroso ritmo de la naturaleza.